
Capsulitis Retráctil
¿Qué es?
La Capsulitis Retráctil, comúnmente conocida como Hombro Congelado, producida por una inflamación de la cápsula articular del Hombro. Esta inflamación suele ser de causa desconocida, aunque también se puede dar después de sufrir un traumatismo (una fractura) o una tendinitis. Su síntoma más característico es la limitación de los movimientos articulares, acompañada de dolor.
El dolor suele iniciarse al finalizar el movimiento (flexión, separación, rotación interna o externa de la articulación del hombro), acentuándose durante las horas de descanso nocturno y perturbando la calidad del sueño del paciente. El hombro va perdiendo la movilidad de forma gradual y su movilización es más dolorosa. Generalmente, la recuperación suele ser espontánea aunque, en ocasiones, puede requerir someterse a cirugía para recuperar la movilidad del hombro.
¿Qué debo hacer?
En este caso, es recomendable que usted acuda a un fisioterapeuta para que valore el tipo de tratamiento que debe recibir, ya que éste es muy intenso y es necesario que usted siga al pie de la letra todas las recomendaciones de le proporcione el fisioterapeuta, además de realizar los ejercicios prescritos en su casa para que el tratamiento ofrezca buenos resultados.
Los ejercicios son de gran importancia para que usted pueda recuperar la movilidad de su hombro. Algunos ejemplos de ejercicios son:
- Coloque la mano de la articulación afectada en la pared, frente a usted. Haga escalar la mano por la pared y trate de llegar lo más arriba que pueda. Cada vez que suba un poco puede parar y sostener la posición durante 30 segundos. Repita este ejercicio varias veces al día.
- Coloque sus objetos de uso diario en estantes altos para obligar a la abducción y flexión del hombro para alcanzarlos.
Agentes físicos que usted puede usar para aliviar el dolor:
- Puede aplicar calor a la zona afectada, vigilando siempre la temperatura para evitar quemaduras.
- Puede realizar baños de agua caliente sobre la zona afectada.
- La crioterapia o terapia con temperatura fría también se puede aplicar, aunque se debe tener en cuenta que puede aumentar la rigidez de la zona. Por tanto, se usará con moderación y no se debe emplear durante más de 10 minutos.