La modificación del estilo de vida, que incluye la introducción del ejercicio intensivo, es más eficaz a la hora de prevenir la diabetes que el tratamiento farmacológico. Desde la fisioterapia se puede ayudar a las personas a planificar un programa de ejercicios personalizado, con el objetivo de mantener un buen control glucémico y conseguir el peso ideal. Además, la fisioterapia produce mejoras metabólicas incluso ante la ausencia de pérdida de peso, reduciendo el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares y mejorando la esperanza de vida.
El fisioterapeuta, con sus conocimientos sobre fisiología y anatomía, puede sugerir ejercicios específicos para personas con complicaciones coexistentes, poniendo cuidado en no realizar ciertos movimientos que podrían ir en detrimento de la salud de la persona.
La mayoría de las personas con diabetes padecen complicaciones musculoesqueléticas, como hombro doloroso, dolor de espalda o osteoartritis. En todas estas afecciones, la fisioterapia juega un papel fundamental a la hora de devolver a la persona una buena calidad de vida. El fisioterapeuta puede emplear una combinación de ejercicios activos y pasivos, así como instrumentos mecánicos y eléctricos, para mejorar las funciones musculoesqueléticas y neurológicas de las personas con diabetes.
Beneficios del tratamiento de fisioterapia en la diabetes:
Entre otros, los beneficios de la fisioterapia en el paciente diabético son:
- Aliviar el dolor. La fisioterapia ofrece varios tratamientos no farmacológicos para aliviar el dolor.
- Mejorar el estado de los pies. La fisioterapia juega un papel importante a la hora de controlar y prevenir los problemas del pie diabético.